Road Trip de 2 semanas por Sicilia

Este año teníamos dudas acerca de dónde hacer nuestro viaje “gordo” del verano. Era la primera vez que íbamos a hacer uno tan largo con nuestro peque y no sabíamos muy bien por donde optar así que, viendo la segunda temporada de White Lotus, nos vino la inspiración, Sicilia.

La isla es bastante grande, así que, nos decantamos por un par de semanas y por ir moviéndonos de hotel ya que, no resultaría cómodo hacer base en una sola ciudad porque como comento, las distancias son grandes.


¿Cuántos días son necesarios para conocer la isla?

Como siempre digo, depende del estilo de viajero pero al menos 10 días son necesarios para poder disfrutar de sus ciudades, pueblos, playas, templos y algunas de sus islas cercanas. Lo ideal, 15 días.

¿Cómo recorrer la isla?

Aunque la conducción en Sicilia es una auténtica locura, no se me ocurre mejor opción que en coche. Nosotros alquilamos uno desde el primer al último día y nos permitió la máxima flexibilidad. Al viajar con un bebé, alquilamos el coche con silla y sin problemas. Lo recogimos y entregamos en el propio aeropuerto (en nuestro caso, salimos y volvimos de Catania).

¿Cómo organizar el itinerario?

Es sencillo ya que “todo lo que hay que ver” está en la costa por tanto, puedes trazar el itinerario en círculo. Ir y volver desde el mismo aeropuerto te resultará fácil para organizar tu road trip por Sicilia. Nosotros hicimos inicio y fin en Catania y empezamos a recorrer en el sentido de las agujas del reloj:

Hicimos noche en las siguientes ciudades:

Catania (2)– Siracusa (2) – Trapani (3)– Palermo (2) y Taormina (2)

Y entre ellas, nos dio para visitar otras ciudades y pueblos increíbles, así como, visitar las Islas Egadas.

Consejos y/o lo que cambiaríamos:

Si pudiera corregir algo, a día de hoy quitaría una noche a Trapani y la metería en la Isla de Favignana perteneciente a las Egadas. Tenía muchísimo ambiente y unas calas preciosas. Se puede dejar el coche en el puerto de Trapani, coger un ferry a la isla y allí, alquilar una moto o bicicleta, para visitar las diferentes calas. En nuestro caso, tendríamos que ver qué opciones ofrecerían para poder ir con el peque por la isla.

Si no dispusieras de tantos días, yo quitaría del itinerario Catania. De todas las ciudades y pueblos bonitos que hay, es la menos atractiva.

Nuestro viaje por Sicilia:

Día 1. Llegada a Catania 

Llegamos en plena ola de calor a la isla de Sicilia y cuando digo ola de calor, digo que el aire era como de secador de pelo y hacía más de 40 grados a la sombra así que, fuimos directos a comer frente a nuestro hotel y subimos a la habitación con el aire acondicionado a tope a echarnos una siesta hasta que se hiciera más tarde y se pudiera salir.

¿Qué ver en Catania?

Su plaza principal es la Plaza del Duomo, en ella podrás ver la famosa Fuente del Elefante de Catania que queda justo frente al Palacio de Los Elefantes. En la misma plaza, a un lado, se encuentra la Fuente del Amenano, dedicada al río del mismo nombre.

En esta zona había bastante ambiente por la noche, hicimos bien alojándonos tan céntricos. Para recorrer el resto de la ciudad, los principales puntos de interés se encuentran a un lado y otro de la plaza. A un lado está el Palacio Biscari y en el otro sentido, la Catedral de Santa Águeda.

Otra zona de mucho ambiente en la ciudad es la de La Peschería, decorada con decenas de paraguas de colores y muchos puestos donde poder comprar pescado, verduras, frutas etc... también hay cerca muchas terrazas donde poder tomar algo.

Como punto de interés cultural, también es importante en la ciudad, su Teatro Romano.

Día 2. Subida al Etna

Nos levantamos tranquilamente y desayunamos en nuestro B&B. Nos vestimos y salimos con la intención de visitar el anfiteatro romano que es lo que nos faltaba por ver de la ciudad sin embargo, el calor apretaba de nuevo y no nos apetecía nada estar turisteando con nuestro peque de año y poco en el carro así que, vimos los buses que hacen excursiones al Etna y decidimos preguntar. Hay justo una parada en la Plaza del Duomo.

En cuanto nos dijeron que allí arriba las temperaturas eran mucho menores no lo dudamos y contratamos la excursión, 35 euros por adulto. 

Como teníamos unos 20 minutos para salir, regresamos al hotel (estaba al lado) para cambiarnos, coger el cortavientos por si acaso y ponernos deportivas en vez de las sandalias que llevábamos.

La excursión empezaba a las 11.30 de la mañana y regresábamos a la ciudad en torno a las 17h.

Llegamos con el bus hasta los cráteres Silvestri. Es donde está el parking y punto de inicio para todo tipo de excursiones por el volcán ya sean por vuestra cuenta o contratadas.

De haberlo sabido, habríamos ido por nuestra cuenta y no habríamos cogido el bus porque allí, hay un tren turístico que también contratamos por 10 euros por adulto que nos llevó a ver los paisajes mas interesantes del volcán así que, realmente el bus no nos aportó más que el traslado (si que es verdad que íbamos con audioguía pero bueno, si no sois tan curiosos o ya sabéis información sobre el volcán, podéis subir por vuestra cuenta).

Si acaso no vais con niños, sois muy aventureros, os encanta andar o todo a la vez, no tenéis porque coger el tren, podéis hacer rutas por los diferentes caminos del volcán. Eso sí, llevad calzado adecuado.

El Etna con niños:

Como decía, podéis ir perfectamente en vuestro coche hasta los cráteres Silvestri. Allí, para verlos, podéis subir con el peque en porteador e incluso en brazos, es un tramo corto y es para ver esa parte. Si no tenéis porteador, el peque no anda y/o no queréis cogerle en brazos no pasa nada, como os digo, esta opción es para ver algo más los cráteres pero con el tren turístico que se coge allí mismo en el aparcamiento, podéis ver el resto de paisajes del volcán que son llanos.

El tren os deja en el mismo sitio de donde sale y allí, hay un par de restaurantes y muchas tiendas de souvenirs para pasar el resto del día.

Nosotros comimos en el de buffet libre, estuvimos viendo las tiendas y cogimos el bus de vuelta que nos esperaba a las 16h.

Cuando bajamos a la ciudad, el calor seguía potente así que, nos tomamos un delicioso helado en el mítico Don Peppinu y marchamos al hotel para ducharnos y bajar a cenar.

Habíamos pasado un día bastante guay gracias al cambio de planes que hicimos sobre la marcha.

Día 3. Camino a Siracusa parando en Noto y desviándonos a Módica y Ragusa.

Modica y Ragusa pillan mejor entre Siracusa y Agrigento pero en nuestro itinerario era mejor incluir estas dos ciudades aquí aunque hiciéramos más kilómetros.

Tras desayunar, recogimos las maletas de nuestro hotel en Catania y nos fuimos camino a Siracusa, el siguiente destino donde dormiríamos en el road trip.

El primer lugar donde paramos fue en un supermercado para comprar pañales para Rodri ya que llevamos los justos para no ir tan cargados en el vuelo y algo de fruta y comida de emergencia también para él.

Tras esa parada técnica, nos dirigimos a Noto, Patrimonio de La Humanidad. Nada más llegar fuimos al punto de información para que nos proporcionaran un mapa. El casco histórico se concentra principalmente en el Corso Vittorio Emanuel y sus transversales y empinadas calles. La ciudad se puede ver en un par de horas. Lo que más destaca es su catedral y la hermosa escalinata que asciende hasta ella.

Tras un paseo, comimos en uno de los restaurantes de la avenida principal y nos marchamos camino a Módica.

La ciudad es pequeña y se divide en dos zonas. La Módica superior y la inferior. Nosotros aparcamos cerca de su imponente catedral, que se encuentra en la zona inferior y después de unas cuantas fotografías subimos en coche a la superior. Paseamos por su calle principal, visitamos sus tiendas y nos tomamos un delicioso helado de chocolate de Módica, famoso en toda Sicilia.

Desde ahí nos fuimos a Ragusa. Desde la carretera ya nos iban impresionando las vistas. Ragusa se divide en la parte vieja (que se denomina Ragusa Ibla) y en la nueva. Lo más encantador y por tanto todo lo que visitar, se encuentra en Ibla así que, estuvimos callejeando por allí y después, decidimos coger un tren turístico (2.5 euros por adulto) que nos recorriera los puntos principales de la ciudad que ya habíamos pateado.


Estábamos aficionándonos a esto de ser turistas en trenes jajaja pero con el peque en ciudades así, repletas de cuestas y con poco tiempo para visitarlas (aunque suficiente), vienen muy bien.

Tras nuestra visita por la preciosa ciudad de Ragusa pusimos rumbo a Siracusa. El ambiente de Siracusa se encuentra en Isla Ortigia, allí habíamos cogido nuestro hotel y os recomiendo que os decantéis por la misma opción, es donde está la vida de la ciudad.

Nada más llegar con el coche ya nos dio buen rollo. Mucho ambiente, muy bonita iluminada, terrazas llenas de gente, mercadillo… Aparcamos en un parking público en el que el día eran unos 20 euros y nos fuimos a hacer el check in. El parking se encontraba justo antes de acceder a Isla Ortigia.

  • Para pagar los parking públicos de la ciudad os recomiendo descargar la aplicación de epark. Nosotros la teníamos porque ya la usamos en Madrid pero si no, llevadla descargada porque los parquímetros no tienen instrucciones muy claras y compensa no estar pendiente de reponer el ticket si no ir ampliando horas según necesitéis desde el móvil.

Tras subir las maletas a nuestro hotel, nos fuimos a pasear por la ciudad y a cenar. 

Después, fuimos a la Plaza del Duomo. Es la plaza principal de la isla y se encuentra rodeada de edificios importantes. Ahí se encuentra la Catedral, el Palacio Beneventano, el Palacio Arzobispal y la Iglesia de Santa Lucia alla Badia. En esta plaza es donde se ve que Siracusa es de esas ciudades que sabe sacarse partido con la iluminación.

Alrededor hay varias heladerías donde cogimos nuestra tarrina pertinente y nos sentamos a tomarla en las escaleras de la Catedral con el resto de turistas.

Después, regresamos a nuestro hotel para dormir.

Día 4. Siracusa y playa

Nos despertamos y desayunamos en nuestro hotel. Sobre las 10 nos marchamos a pasear bordeando toda la costa de la ciudad. Las vistas desde ese paseo son preciosas.

El calor no era el de los dos primeros días pero no deja de ser mediodía en una isla del mediterráneo en el mes de Julio así que, paramos a tomar una granita de limón en una de las terrazas que se encuentran frente al Templo de Apolo. Después, paseamos por el resto de la ciudad que ya habíamos visto de noche y paramos a comer pasta, ensalada y calamares fritos. En toda la isla veras que hay mucho pescado, es muy popular.

En Siracusa también podéis visitar el Parque arqueológico de Neapolis. Nosotros no fuimos pero si os interesa, la entrada son 10 euros por persona y se encuentra al norte de la ciudad, en Viale Paradiso.

En vez de visitar como digo la Neapolis, decidimos ir a disfrutar de la playa con nuestro peque. Fuimos a una bastante cercana, la de Aranella

La playa tiene una parte privada (como la mayoría en Italia) con su club lleno de comodidades para los clientes, hamacas, bar, duchas, vestuarios etc…pero justo al lado, hay una parte pública donde, como no pretendíamos pasar mas de un par de horas, nos acomodamos.

Después de bañarnos y jugar con Rodri, fuimos al bar del club para merendar. Ahí fue la primera vez que probé los deliciosos cannolis. Un dulce típico siciliano que consiste en una galleta de pasta frita enrollada y rellena de ricota, en el caso de los clásicos.

Tras merendar, nos marchamos de vuelta a Isla Ortigia para ducharnos y salir a cenar.

Día 5 – Valle de los templos y Schala de Iturchi (Agrigento)

Hicimos el check out en el hotel de Siracusa y nos marchamos hacia el Valle de los Templos en Agrigento.

Nuestra intención era llegar temprano para que no nos pillara el medio día allí ya que es una esplanada sin sombras pero entre unas cosas y otras más la distancia, justo, las 12 del medio día xD.

El Valle de los Templos con niños.

Se puede hacer perfectamente con carrito. No cometáis nuestro error porque habíamos dudado y finalmente optamos por portearle, bueno… mi marido lo porteó y el pobre, a las 12 de la mañana con un niño de más de 10 kilos a sus espaldas y sin una sombra, os podéis imaginar lo bien que lo pasó.

Además, hay unos trenecitos que te llevan desde el inicio del recorrido al final y te traen de vuelta.

No son muchos kilómetros, en total se tarda unas dos horas en ver todo pero dependiendo de si vais con alguien muy mayor, estáis muy cansados, niños etc… tenéis esa opción. Nosotros encima, no utilizamos tampoco esta vía haciéndonos los fuertes xD

El valle tiene un aparcamiento muy grande en la entrada, dejamos el coche y fuimos a las taquillas. Nosotros ya llevábamos la entrada online porque se supone que era algo más económica, 15 euros: enlace 

Pero para la audioguía tuvimos que esperar igualmente la poca cola que había. La audioguía cuesta 5 euros y tienes que dejar el dni físico como garantía hasta que salgas y devuelvas la radio. Este tipo de visitas, salvo que seas un experto en historia, merece la pena hacerlas con algún tipo de guía.

Después de hacer el recorrido, paramos en el bar que hay a medio camino a tomarnos una coca-cola bien fresquita y reponer fuerzas. 

Cuando salimos del Valle, nos fuimos a nuestro hotel en Agrigento.

Nos alojamos en la parte baja, en la zona de la playa, no en el pueblo, con la intención de estar cerca de la Scala dei Turchi y poder ver el atardecer allí y que no se nos hiciera tarde para regresar a cenar.

  • A día de hoy, me alojaría en Agrigento pueblo ya que tiene mucho encanto y si veis la Scala con el atardecer bien, si no también y si ni la veis pues también bien. Tiene mucha fama pero realmente es debido a la serie que se inspiró en los libros del Comisario de Montalbano. Es un sitio bonito pero que no te engañen las fotos de Instagram, ni el agua es cristalina ni la piedra es blanca brillante. Es más, con marea alta no puedes subir sobre ella, a diferencia de como verás en la mayoría de fotos.

Desde el Valle de los Templos llegamos tan tarde a la zona de nuestro hotel, que los pocos bares que había estaban cerrados así que, al menos en uno nos salvaron haciéndonos unos bocadillos.

Después de comer, fuimos a hacer el checkin a nuestro hotel, nos pusimos los bañadores y nos fuimos a una playa al lado de la famosa Scala dei Turchi.

Estuvimos toda la tarde jugando con el enano en el agua y dando un paseo hasta la Scala. 

El caso es que es un sitio chulo que te llamaría la atención si lo encontraras de casualidad pero como os decía, nada del otro mundo en cuanto a lo que puedas esperar.

Ya secos y habiendo hecho unas cuantas fotos, regresamos al hotel para ducharnos, vestirnos e ir a Agrigento pueblo a cenar y tomar un helado like always xD.

Como os decía mas arriba, Agrigento y su casco histórico sí tiene encanto.

Día 6 De Agrigento a Trapani parando en Mazara del Vallo

Hicimos el check-out tras desayunar en nuestro hotel y cargamos maletas rumbo a Trapani. Como teníamos por delante un largo recorrido, decidimos qué ver entre ambas ciudades y encontramos que podía ser interesante Mazara del Vallo. No nos equivocamos, el pueblo tiene mucho encanto.

Aparcamos frente al mar y nada más llegar entramos en la Iglesia de San Francesco. Su interior no os dejará indiferente. De ahí, fuimos a la Plaza de La República donde queda la Catedral del Santísimo Salvador.

Seguimos callejeando y descubriendo rincones accediendo a lugares que en principio no sabíamos qué eran pero que nos resultaron muy atractivos. Entre ellos, Collegio dei Gesuiti.

También es interesante visitar su barrio judío, Kasbah.

Después de recorrer las calles de Mazara del Vallo nos sentamos en un restaurante del puerto para comer. No queríamos que nos pasara lo que el día anterior y llegar a Trapani con todo cerrado y tener que comer malamente.

Llegamos a la ciudad por la tarde y como el hotel nos encantó, nos echamos un rato una pequeña siesta, subimos a la piscina de la azotea para bañarnos y después, salimos a dar una vuelta por la ciudad.

Callejeando por su casco histórico te encontrarás con muchos edificios emblemáticos sin apenas darte cuenta, varias iglesias, palacios y la Catedral de San Lorenzo.

La avenida Vittorio Emanuel está llena de vida, de bares, tiendas de souvenir etc… y sin duda, lo que mas me gustó, fue pasear por el paseo que recorre las murallas, Mura di Tramontana. Las vistas de la ciudad desde el final, resultan una imagen preciosa.

En Trapani también puedes visitar Las salinas. Nosotros ya hemos visto esta clase de paisajes y no nos llamaba la atención así que, los ratos que pasábamos por la ciudad eran perdiéndonos por sus calles.

Después de cenar una tabla de embutidos y otros productos sicilianos y una pizza para los dos en uno de los restaurantes que nos había recomendado la recepcionista de nuestro hotel, regresamos para dormir.

Día 7. Erice desde Trapani

Sin duda, uno de los pueblos más bonitos que vimos en nuestro road trip por Sicilia. Se trata de un pequeño pueblo medieval que se ubica en el Monte Giuliano.

Nosotros fuimos desde Trapani en coche pero podéis coger también el teleférico si la climatología lo permite.

Nos perdimos por sus calles y a la hora de comer, regresamos a Trapani. Se nos había hecho algo tarde así que, comimos en el restaurante del hotel.

Por la tarde, aprovechamos de nuevo la piscina y dimos otro paseo por la ciudad.

Día 8. Islas Egadas

Trapani es la puerta para visitar las preciosas Islas Egadas y no íbamos a perder la oportunidad de verlas. Nosotros contratamos una excursión para ver Favignana y Levanzo.

Nos costó 50 euros por adulto y pasamos el día entero (comimos en el barco, paramos a nadar, a visitar las dos islas…). Si quieres hacerlo por tu cuenta, puedes coger el ferri desde Trapani a Favignana e iniciar la visita a tu rollo.

Las islas son preciosas. Favignana tiene mucho ambiente, varios restaurantes, tiendas, etc… y Levanzo es directamente de postal. Mucho más pequeñito pero está rodeado de aguas turquesas increíbles en las que no dudamos en bañarnos.

La excursión estuvo genial y pasamos un día estupendo.

Día 9. De Trapani a Palermo parando en Segesta.

Nos despertamos temprano y nos fuimos rumbo a Palermo parando en los Templos de Segesta. La entrada son 11 por persona mas 5 audioguía o guía en papel. Desde el templo que hay en la parte baja, un autobús te sube al anfiteatro romano que hay en la parte alta por tanto no tendrás que andar mucho si no lo deseas.

Es menos popular que el Valle de los templos de Agrigento pero merece la pena visitarlo, está muy bien cuidado y en muy buen estado.

Después de visitarlo, nos marchamos a Palermo. Donde la decadencia de la ciudad forma parte de su encanto. Hicimos el check in en nuestro hotel que estaba en pleno centro y fuimos a comer algo.

Después, paseamos por la ciudad. Durante este viaje nos hemos dejado llevar en cada uno de los lugares a visitar y no tanto por buscar antes qué visitar y es que, todos se dejan ver de forma muy fácil, no son grandes ciudades ni pueblos y  todas las zonas tienen su encanto. 

En Palermo, hicimos lo mismo pero cabe resaltar que no puedes perderte ver su impresionante Catedral. Su arquitectura refleja mezclas de elementos góticos, barrocos y árabes debido a las diferentes épocas que vivió. El acceso es gratuito.

Día 10. Cefalú desde Palermo.

Nos levantamos temprano y tras desayunar en un bar frente a nuestro hotel, nos marchamos a visitar Cefalú.

No puedes perderte esta ciudad si vas a hacer un road trip por Sicilia. Es pequeñita, preciosa y no pudimos disfrutarla mas. Pasamos el día paseando por sus preciosas calles, disfrutando de la Catedral y de su plaza, degustando una deliciosa pasta en el paseo marítimo y bañándonos en la hermosa playa en la que las casas se adentran literalmente en su arena la cual está bañada por aguas cristalinas.

Para los fans de White Lotus, os resultará curioso saber que las escenas de playa que supuestamente están grabadas en Taormina son aquí, en Cefalú.

Después de pasar un día increíble, regresamos a Palermo para cenar y dormir.

Día 11. De Palermo a Taormina parando en Mesina.

Se acercaba el final del viaje y nuestro último alojamiento era en la preciosa Taormina. Desde Palermo, decidimos hacer parada en Mesina. Seguramente os resulte familiar por el estrecho de Mesina, el canal que separa la isla de Sicilia de la península Itálica.

Como habíamos decidido ese mismo día parar a visitar la ciudad, decidimos coger de nuevo un tren turístico que esperaba frente a la Catedral para ver los principales puntos de interés.

Después del paseo, aprovechamos a comer y continuar nuestro viaje hacia Taormina.

Llegamos aun de día por la tarde y tras quedar con el dueño de la que iba a ser nuestra casa por unos días y llevar las maletas, nos fuimos a dar un paseo por la ciudad.

Taormina es preciosa, podría decirse que es la zona más pija de la isla de hecho, el hotel de la segunda temporada de The White Lotus se encuentra aquí y es el Four Seasons San Domenico Palace donde la semana puede rondar los 27000 euros... casi ná.

No pudimos evitarlo y como fans de esta segunda temporada, entramos a visitar el hotel y ver las localizaciones de la serie.

Por supuesto, también paseamos por la ciudad, por su avenida principal el Corso Umberto, con sus tiendas de lujo y sus fachadas medievales así como la puerta barroca y la Catedral.

Otro lugar de interés que visitar en la ciudad y al que nosotros decidimos no ir por priorizar otros lugares, es el Teatro Griego de Taormina.

Día 12. Isola Bella.

Decidimos aprovechar uno de nuestros últimos días en la preciosa Isola Bella. Tras desayunar en nuestro B&B, cogimos el funicular en Taormina que desciende hasta la preciosa Isla. La Perla del Mar Jónico.

El descenso no dura más de 5 minutos y son 3 euros ida y 3 vuelta por persona. Pudimos bajar perfectamente en la cabina con nuestro carrito plegado y nuestro peque.

Una vez llegamos a la isla, descendimos hasta la playa. Dudamos si acomodarnos en la arena para pasar el día pero como nuestra intención era un día de relax y de varias horas, nos decantamos por alquilar un par de hamacas en uno de los puestos de la playa.

La hamaca nos costó 30 euros por día y persona.

Estuvimos bañándonos, comimos en el restaurante al que pertenecían nuestras hamacas y fuimos hasta la casa que está en lo alto de Isola Bella pero importante, no se puede acceder en ropa de baño. Nosotros fuimos andando porque la marea aún estaba baja.

Isola Bella como su nombre indica, es una preciosa isla que cuando la marea está baja, queda unida a la costa. En lo alto, se encuentra una casa que durante su historia pasó por varios propietarios hasta que en 1998 pasó a ser instituida como reserva natural y la gestión a día de hoy la lleva la provincia de Mesina.

Día 13. De Taormina a Catania parando en La Virgen de La Roca, Castelmola y la rivera de los Cíclopes.

Era nuestro último día en Sicilia y no por ello iba a ser desaprovechado así que, desde bien temprano, salimos rumbo a descubrir sitios nuevos.

En primer lugar, fuimos a los Jardines Villa Comunale. Es un jardín precioso en plena ciudad que tiene también áreas de juego donde aprovechamos para que Rodri jugara un rato.

Después, a media mañana, fuimos a visitar la Virgen de La Roca. Está situada en una montaña desde donde hay unas vistas increíbles de la ciudad. En una pequeña iglesia insertada en la roca de la montaña se encuentra la Virgen. Merece muchísimo la pena entrar a verla, sobre todo por el interior de la iglesia en sí con sus techos y paredes atravesados por las rocas.

Tras esta visita, nos marchamos a Castelmola. Se trata de un pequeño pueblo ubicado a más de 500m sobre el nivel del mar y es precioso.

Su casco antiguo está dispuesto por varios restaurantes, tiendas e iglesias. Merece la pena dedicarle un buen rato y no marcharte de Sicilia sin conocerlo.

Aprovechamos para comer allí y después poner rumbo al aeropuerto. Como el vuelo salía bastante tarde y nos reconcome no aprovechar el tiempo, aprovechamos para visitar de camino La rivera de los Cíclopes.

Consiste en un tramo de 12 kilómetros a lo largo de la costa, de rocas enormes que salen del mar. Dimos un paseo por a lo largo del tramo y aprovechamos para tomar un aperitivo antes de marcharnos.

Ya en el aeropuerto, entregamos el coche de alquiler y esperamos nuestro vuelo de vuelta a Madrid. 

Sin duda, recomiendo muchísimo realizar este viaje. Fue una experiencia increíble con una oferta de todo tipo, paisajística, ruinas, templos, ciudades y pueblos con encanto, oferta gastronómica… ¿Qué mas se puede pedir? ¡Espero que os animéis a hacerlo!

🍲Gastronomía a probar en Sicilia:

Por supuesto, como en el resto de Italia, las pizzas y la pasta son protagonistas pero en la isla, hay muchos otros platos típicos y deliciosos que probar.

La caponata Siciliana, Un plato de verduras y berenjena.

Cualquier cosa que lleve crema de pistacho, desde la bollería hasta la pasta, helados de pistacho y chocolate…

Arancinis, una especie de croqueta rellena de arroz y cualquier otro producto, setas, carne, queso…

Tablas de embutidos, quesos, mortadela siciliana etc…

Cannolis, delicioso dulce de pasta frita rellenos de queso, chocolate, nata etc…

Pasta alla Norma

Granitta, no es un granizado y tampoco un sorbete, es un mix de los dos y es refrescante y delicioso. La suelen acompañar de un brioche para meriendas o desayunos muy contundentes.









🏨Los hoteles en Sicilia

La oferta hotelera de la isla, sobretodo en las ciudades y pueblos más pequeños, es mayoritariamente de Bed and Breakfast que de hoteles en sí y encima, a precios de hoteles de a partir de 4 estrellas en España. La media por noche en un B&B está en torno a los 130 euros.

En nuestro caso, los mejores hoteles los cogimos en Trapani y Palermo porque como decía, eran hoteles y no B&B. Es cierto que en los B&B, las habitaciones estaban estupendas, limpias, amplias, con todos los productos necesarios, los desayunos eran atendidos por una persona que iba allí por la mañana y nos servía el café y la bollería… pero como eran habitaciones en antiguos edificios, la mayoría no tenían ascensor y era una odisea salir cada mañana con el niño, el carro… y en el caso de los check in y check out, con las maletas.

Por tanto, si viajáis con niños, con alguien mayor, con sillas de ruedas etc… cercioraros muy bien de este tema antes de elegir un B&B.

Nuestros alojamientos en Sicilia:

Catania:

Contra: Sin ascensor y edificio muy viejo.

A favor: Limpia, amplia, recientemente reformada y ubicación excelente.

Siracusa Apollo Suite

Contra: Ascensor diminuto y solo estaba a partir de la primera planta, hasta ahí había que subir escaleras. Había muchas hormigas en la habitación, tuvimos que decirlo y entraron a limpiarla y tapar unos agujeros por donde podían estar colándose.

A favor: el desayuno y la ubicación.

Agrigento: B&B Baglio Santa Croce

El mejor B&B de los que estuvimos en cuanto a servicios. Ascensor hasta la planta baja, recepción, la dueña super agradable y no olvidaré los croissants de pistacho tan increíbles del desayuno.

Contra: habitación algo pequeña y muy modesta. La ubicación no es en el pueblo de Agrigento por lo que no repetiríamos, pero esto fue fallo nuestro porque pensamos el itinerario de otro modo.

Trapani: Room of Andrea Hotel

Un hotel excelente, las cadenas nunca nos defraudan, la recepcionista era super amable, hablaba español perfectamente, desayuno increíble y una pisicina maravillosa en la azotea.

Palermo: Eurostars Centrale Palace

Estupendo hotel, decoración preciosa, una recepción enorme, terrazas para tomar algo con vistas y ubicación excelente.

Taormina: Athena Charming Rooms

A favor: la simpatía del dueño, Rosario. Nos llevó en coche las maletas desde el parking del pueblo, las cargó hasta la habitación, nos recomendó restaurantes y dijo que fuésemos en su nombre etc…

La ubicación excelente, al lado del funicular para ir a Isola Bella y a escasos minutos del parking publico y del casco histórico.

Las vistas desde la terraza, preciosas.

Contra: Muchas escaleras y sin ascensor para llegar hasta allí. Baño muy pequeño.


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