Parte 6. Yosemite

Como comentaba en el post anterior, nosotros veníamos desde la zona Este por lo que accedimos al parque por la entrada de Tioga Pass.
El abono de parques anual es válido también para Yosemite por lo que al llegar a la garita, la guardabosques nos dejó acceder sin ningún cobro previo y nos entregó los mapas correspondientes.
Nada más llegar, lo que hacemos es ir a los principales miradores de esa zona ya que, nuestro hotel se encuentra en lado opuesto y no regresaremos más aquí.

En primer lugar, vamos a Toulomne Meadows, desde donde disfrutamos de un paisaje increíble, uno más de los que ofrece este precioso parque nacional.
Después, nos dirigimos a Olmsted Point, uno de los miradores de la zona desde donde se puede ver perfectamente Half Dome. En este punto es donde realmente empezamos a ser conscientes de las vistas tan únicas del lugar. No se trata de un paisaje más con montañas y árboles inmensos si no que, hablamos de piezas enormes de granito.
Half Dome, que significa literalmente media cúpula, tiene una cresta granítica que se alza 1440 metros por encima del nivel de la base del valle de Yosemite. Hace años se consideraba imposible de escalar pero en 2011, se rompió dicha leyenda cuando un escalador consiguió subirla en tan solo hora y media.

Tras un buen rato allí disfrutando de las vistas, cogemos el coche para ir a nuestro hotel, el Cedar Lodge.
Como hace buen tiempo y el hotel dispone de piscina aprovechamos para tumbarnos un rato en las amacas y darnos un baño. Siempre viene bien disfrutar de las instalaciones y servicios de los hoteles, muchas veces las pagamos y no las aprovechamos como nos gustaría.

Sobre las 20.30 nos dirigimos a cenar al restaurante del hotel. Alrededor del parque, con el gps, no vimos ningún lugar más donde poder comer así que, optamos por lo que teníamos más cerca. Unos tenders de pollo y unas fajitas después, nos subimos a la habitación. En torno a las 22.30, estábamos todos acostados.

A la mañana siguiente, nos despertamos a las 06.30h, desayunamos, nos duchamos y vamos a la máquina de hielo para reponer la nevera portatil. Hoy, comeremos por el parque.
Al salir con el coche, nos dirigimos hacia la otra parte del valle, hacia Mariposa Grove (el parque de secuoyas de Yosemite) pero antes, paramos en el market a comprar la comida. Un paquete de pan de molde, uno de salami, otro de jamón york, otro de queso y un par de latas de cerveza, 22 euros. Si te sirve de consuelo, lo que es carísimo en Estados Unidos es el alcohol pero aun así, los mercados de los parques nacionales se aprovechan.


Nosotros en este viaje, tuvimos que suprimir el Parque Nacional de Secuoyas porque en un viaje con tantísimas cosas que ver, había que tener prioridades por lo que decidimos suprimir ese ya que, en Yosemite, teníamos la posibilidad de ver estos árboles tan increíbles.


De camino a Mariposa Grove (a una hora y media del hotel en coche), dejamos puntos muy interesantes para la vuelta, el sol estará más bajo y será mejor para fotografiarlos.
Cuando llegamos al parking de Mariposa, cogemos allí el autobús gratuito que lleva al inicio del sendero del bosque de secuoyas.


Desde 2018 es obligatorio coger dicho autobús. El parking donde se coge está muy bien habilitado y llegar hasta allí en coche es muy cómodo.

El recorrido ofrece distintas paradas alucinantes. Una de las primeras es el Fallen Monarch. Esta enorme secuoya está caida desde siempre, no se la ha conocido en pie.
A continuación, otra secuoya más que reseñable es Grizzly Giant. Su base de 30 m de circunferencia, sus 64 m de altura y sus, aproximadamente, 2.700 años de antigüedad, harán que te quedes con la boca abierta.
Tras unas cuantas panorámicas para poder captar semejante magnitud, nos dirigimos al siguiente punto relevante, el California Tunnel Tree. Tras la caída del Pionner Cabin Tree en 2017, esta es la única secuoya que queda atravesada por un tunel. Si impresionan de frente, pasar por debajo de una de ellas es algo alucinante...
El camino hasta aquí son 1,2 km andando. Si quieres ver más, deberás añadir a tu visita por Mariposa unas cuantas horas más, además, el resto del parque es menos atractivo por lo que la mayoría de viajeros, regresan de vuelta al autobús.

Nosotros, dimos un breve paseo por el bosque comentando qué haríamos si de repente apareciera un oso... je,je pero gracias a dios, no vimos ninguno. Quienes sí que nos acompañaron durante un rato fueron unos preciosos ciervos.

Sobre las 11, estábamos cogiendo nuestro coche. De aquí, nos dirigimos al Hotel Wawona, otro de los puntos clave dentro del parque. Recordamos Wawona como una de las mejores visitas del viaje ¿por qué? Porque por fin, tras 10 días en Estados Unidos, encontramos una cafetería donde ofrecen un buen café. Nos sentamos en su preciosa terraza a disfrutar de ello y de una enorme cookie deliciosa así como del wifi. No hay cobertura en todo el parque por lo que los datos de nuestra tarjeta, no funcionaban y aquí, pudimos aprovechar a escribir un poco a las familias como iba el viaje.

El hotel tiene una estética preciosa,  alojarse ahí debe ser espectacular. Tras un descanso en aquella maravilla de jardines, cogimos nuestro coche de nuevo para ir a otro famoso mirador del parque, Glacier Point.
El mirador es alucinante, se encuentra a 2000m de altura por lo que no está abierto todo el año. Es importante que os informéis antes de ir ya que, durante 6 meses está cerrado. Desde este mirador, podrás vislumbrar perfectamente el Half Dome.

Muy cerca, hay otro mirador (mucho menos masificado) que ofrece las mismas vistas pero desde otra altura, el Washburn Point.


Después nos dirigimos a la joya de lo corona de los miradores, Tunnel View.
Para mí, sin duda, la imagen del parque. Si solo pudiese estar unas horas en Yosemite, iría directa a este punto. Las vistas son dignas de un cuadro, de una postal... desde aquí podrás ver El Capitán a la perfección.
Como eran las 14.11h, decidimos aprovechar a comer por allí. Como empezó a chispear, nos metimos en el coche para hacernos los bocatas de la compra que habíamos hecho por la mañana.

Una hora después, nos dirigimos a ver la cascada Bridalveil. Son 188m de caída. Como hacía mucho viento, el poco agua que caía, se desplazaba y se veía tan solo un pequeño hilo. Imagino que en época de lluvias está mucho más bonita. Aun así, merece la pena verla.
Estando allí empezó a llover más fuerte así que, tuvimos que cancelar la ruta que pretendíamos hacer (una hora hasta otras cascadas, Yosemite Falls) y cogimos el coche para regresar al hotel, al fin y al cabo eran casi las 17h y en cuestión de una hora anochecería.

Estuvimos juntos en la habitación del hotel viendo la película de Buried que estaban emitiendo en ese momento. Sobre las 19.30 salimos a dar un paseo y a cenar. En torno a las 21, se nos antojó bajar al jacuzzi y a la piscina cubierta del hotel y allí, estuvimos un buen rato hablando con una chica majísima que era una marine del ejército de Estados Unidos.

A la mañana siguiente, estábamos en pie a las 06.30h. A las 8, en marcha con el coche cargado para viajar a la última ciudad de este road trip, San Francisco.

Nuestra salida en el parque hacia nuestro siguiente destino fue a través de El Portal. Esta es la entrada principal del parque y es por la que la mayoría de los viajeros llegan. Sin embargo, nuestra ruta era en el sentido opuesto.

Al salir, paramos en Mariposa es un pueblo pequeño pero es precioso. Típico de película americana navideña, no se definirlo... lo sentí así. Nos metimos en una cafetería a desayunar y no podía ser más típica. Las camareras eran madre e hija, rubias, con ojos azules, la cafetera de café negro con la que te servían constantemente, la plancha donde hacían los huevos revueltos... y nosotros, sentados en la barra en sus taburetes giratorios mientras todo aquel que llegaba y se sentaba a nuestro lado, hablaba con nosotros. En serio, en este viaje, vas a vivir constantemente una película.

Tras terminar de desayunar, nos marchamos camino a San Francisco pero os contaré todos los detalles sobre la ruta hasta allí y la ciudad, en el próximo post.

¿Cómo moverte en Yosemite?
Como en todos los parques de la costa Oeste de Estados Unidos, las carreteras tienen un estado excepcional y los servicios son gratuitos. Es decir, podéis aprovechar a desplazaros con vuestro coche (muy comodamente) o en autobuses. De cualquier manera, nosotros estuvimos en Septiembre, si vas en época de nevadas infórmate bien del estado de las carreteras etc...


Los incendios controlados de Yosemite
Como a nosotros, os llamará la atención la cantidad de secuoyas que hay quemadas en el parque así como incendios controlados. Esto se debe a la ayuda del hombre para que el parque perdure. Las secuoyas necesitan ciertas condiciones para su reproducción y desarrollo por lo que en el bosque, se provocan incendios que dejan una capa de ceniza rica en minerales que favorecen su nutrición.


Tips para el parque
👕Aunque vayas en verano, es de las zonas más frías de los parques naturales que verás en este road trip por lo que no dudes en llevar un cortavientos y un pantalón largo así como ropa y calzado cómodo.

🛏Dormid en El Portal. Desde aquí, podéis acceder fácil y rápidamente a todos los puntos importantes del parque y además, tenéis restaurantes, hoteles etc... está en la entrada de Yosemite.

→ Si tenéis que descartar algo en vuestra ruta para que Yosemite encaje, suprimid el parque de Secuoyas. Dentro de Yosemite en Mariposa Groove, podéis ver cientos de ellas.


Nuestro hotel en Yosemite
Estuvimos en Cedar Lodge. La verdad que está bastante bien. A 9 minutos de El Portal. Dispone de restaurante, bar, tienda, piscina al aire libre, piscina cubierta y jacuzzi.
Todos los servicios estuvieron disponibles y los pudimos disfrutar.
Las habitaciones se disponen en dos plantas que dan directamente al exterior y tiene parking suficiente para poder dejar el coche bajo la vuestra.
La limpieza es aceptable.
Repetiríamos.


Parte 7 Costa Oeste. San Francisco -->

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