Como cada mañana, quedamos con nuestro guía en el hotel para empezar la ruta.
En torno a las 8.30h nos pusimos en marcha. El itinerario lo traía organizado de otro modo pero Miguel nos recomendó variarlo en función de las horas de visita que conlleva cada sitio y de la distancia entre lugares. De modo que finalmente quedó así:
- Día 3: Goa Lawah - Lotus Lagoon - Ujung Water Palace - Tirta Gangga - Lempuyang
Recordad que en el post Guía para Bali, tenéis toda la info referente a cómo contratar un conductor, organizar tu viaje etc...
Lo primero que visitamos fue la famosa Cueva de los Murciélagos y sí, es un templo con más de mil años de antigüedad pero literalmente, es una cueva llena de murciélagos. No puedo decir que fuera mi templo favorito, los que me conocen saben que no hay animal que más "miedo/asco" me dé en el mundo... lo siento pero es una fobia que no consigo quitarme jajaja A pesar de todo, aguanté el tipo frente a la cueva.
Miguel nos contó que para ellos es uno de los templos más sagrados de Bali porque creen que la cueva llega hasta el templo Madre Besakih. Sin embargo para los turistas no creo que tenga más atractivo que las decenas de miles de murciélagos que están en la cueva y que provocan un sonido que describiría como "chirriante" desde que accedes a ella.
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| Entrada Goa Lawah |
👚Hasta ahora para acceder a cualquier templo únicamente necesitamos ponernos el sarong, sin embargo en Goa Lawah también tuvimos que ponernos una especie de cinturón. A la entrada te prestan lo necesario aunque en nuestro caso, Miguel siempre llevaba nuestro atuendo en el maletero.
💰El precio de la entrada es de 15.000 rp.
Al salir de allí fuimos dirección al palacio Ujung Water Palace pero antes, pedimos parar en el Lotus Lagoon imaginándome que era algo del otro mundo (las fotos de internet, que captan solo lo bonito de los lugares...). No es nada destacable pero si os pilla de camino no está mal, ni si quiera hay que bajar del coche para verlo si no queréis.
Como decía, tras esta breve parada, fuimos al palacio Ujung Water Palace. Había visto muy poco acerca de él en las redes sociales, blogs etc... y me sorprendió mucho porque me parece un lugar precioso y muy fotogénico.
💰Eso sí, es de las visitas más caras que hicimos en Bali, 46.000 rp.
Merece la pena, es caro con respecto al resto de lugares que podrás ver en la isla pero al cambio no dejan de ser unos 3-4 euros. El palacio está muy cuidado y es muy agradable pasear por sus jardines ya que, a diferencia del resto de sitios, podrás disfrutarlo prácticamente para ti solo, al menos en nuestro caso fue así.
Se terminó de construir en 1921 y era el palacio de verano de la realeza durante la época de la colonización holandesa de Bali.
Miguel nos contó la historia de este lugar durante el paseo y al finalizar, nos subimos de nuevo al coche para ir a visitar el conocidísimo Tirta Gangga. Con poco que hayas visto sobre Bali en las redes sociales, lo habrás visto miles de veces fotografiado.
Fotos perfectas con chic@s vestid@s perfect@s, sin gente alrededor, posando perfectamente sobre una piedra y rodeados de enormes peces de colores... ese, ese es Tirta Gangga.
Es lógico que esta isla invite al postureo, cada lugar es más bonito que el anterior y menos que el siguiente y este palacio es sin duda espectacular. A causa de ser arrasado por un terremoto y por la lava del Volcán Agung en otra ocasión, la construcción que verás no es la original aunque se reconstruyó con todo tipo de detalles ya que a pesar de no ser un templo, la carga espiritual de este lugar hace que los balineses hinduistas lo consideren un lugar sagrado. De echo Tirta Gangga, significa literalmente "Agua del Ganges".
👚Como en el caso anterior, al no tratarse de templos, sino palacios, no es necesario llevar ninguna vestimenta especial.
El palacio tiene varias piscinas cuyo agua proviene del manantial que queda a los pies de un enorme árbol que hay a la izquierda a la entrada del complejo. Algunas de ellas están reservadas para el baño ;)
Cómo la hora de comer estaba casi encima, aprovechamos para almorzar en el restaurante que hay en la entrada el cúal comparte nombre con el palacio. Miguel nos recomendó hacerlo así porque la siguiente y última visita del día era Lempuyang y nos avisó de que nos llevaría bastante tiempo (aún no entendíamos muy bien qué quería decir con "bastante tiempo" pero luego lo comprendimos).
Durante el camino nos contaba que hace unos años el templo Lempuyang no era apenas visitado por los turistas pero que a raíz de hacerse famoso en las redes sociales por la famosa fotografía en las puertas del cielo, comenzó a popularizarse.
A pesar de ello, nos contó que para ellos siempre ha sido uno de los templos más sagrados por ser el más alto de todo Bali y por tanto, estar mas cerca del cielo.
Solo por este motivo, la visita merece la pena. No es ni mucho menos el templo más bonito, pero si su entorno o mejor dicho, sus vistas.
🚗Para ascender hasta el templo tienes 3 opciones:
- Con tu propio vehículo: si es moto.
- Andando: inviable si no te sobra el tiempo, está bastante lejos y es un ascenso muy duro.
- En shuttle contratado al llegar: el mas recomendable.
Nosotros optamos por la tercera opción, el precio es de 20.000 rp por persona y por viaje, es decir, 40.000 rp ida y vuelta por persona. Cargan una especie de camioneta pick-up con varios turistas y te llevan hasta arriba.
Cuando llegas, te prestarán un sarong si no tienes y un pañuelo para taparte los hombros (si los llevas descubiertos). Al atravesar la puerta del templo, los sacerdotes te echarán en la cabeza agua bendecida. A partir de aquí, tienes dos opciones:
Pasear por el templo y observar las preciosas vistas que quedan tras las puertas del cielo con el Monte Agung de fondo y/o esperar unas 2 horas de cola para hacerte una foto frente a ellas a cambio de una propina.
La foto la habrás visto miles de veces, pero hay algo que debes saber antes de visitarlo para no decepcionarte. Yo lo sabía, por lo que ni me defraudó ni me entusiasmó, como digo, creo que está en un entorno espectacular y que sólo por ser tan sagrado para ellos, merece la pena visitarlo. Pero como muchas cosas en esta vida, nada es lo que parece y la fotografía que habrás visto tantas veces, no es del todo real. El lago que hay bajo las puertas no existe. Lo crean los propios balineses que te hacen la foto gracias a un cristal ahumado que ponen bajo la lente de tu teléfono et voilà:
A mí la foto me parece preciosa la verdad, pero siendo honestos, la real es esta:
He leído críticas de algun@s influencers en internet haciéndonos creer que han descubierto la panacea por contarnos esa "verdad", indignados por el postureo del que viven algunos o del que quieren vivir otros, pero ahí tienen su foto, tras esperar sus dos horas de cola como todos y ahí está, en su perfil...
Nosotros estando allí y sabiendo lo que nos íbamos a encontrar, no íbamos a volver sin el retrato de la parte más bonita del templo con o sin lago (para mi gusto) junto con las preciosas escaleras traseras.
Tras hacernos las fotos, llegó Miguel (que tiene más que calculado el tiempo de espera y estuvo mientras tanto tomándose un café con otros guías) para bajar de nuevo los 3 en el shuttle y recoger nuestro coche en el parking para regresar a Ubud.
Durante el camino de vuelta, hablamos con Miguel acerca de nuestro itinerario para el día siguiente, decidimos hacer unos cambios de última hora según lugares turísticos que él mismo nos contaba y según el tiempo que llevaba cada uno. Nos contó que al día siguiente él no podría venir porque tenía examen y vendría su padre, Andres, con quien contacté la primera vez desde España, así que, nosotros encantados de haberle conocido a él, a su hermano David y a su padre al día siguiente.
Como los días anteriores, decidimos quedarnos en el centro de Ubud para aprovechar el final de la tarde, cenar, tomar un helado y después, volver de noche a nuestro hotel cogiendo el servicio de recogida que ofrecían, cerca del Lotus Café.
¿Qué os ha parecido el post? y con respecto a Lempuyan ¿Esperaríais también hora y pico de cola para un foto ya que estais allí, iríais pero no haríais foto o simplemente no os parece un templo "digno de visitar"
-> Día 4 en Bali - Ruta Sur
💰El precio de la entrada es de 15.000 rp.
Al salir de allí fuimos dirección al palacio Ujung Water Palace pero antes, pedimos parar en el Lotus Lagoon imaginándome que era algo del otro mundo (las fotos de internet, que captan solo lo bonito de los lugares...). No es nada destacable pero si os pilla de camino no está mal, ni si quiera hay que bajar del coche para verlo si no queréis.
Merece la pena, es caro con respecto al resto de lugares que podrás ver en la isla pero al cambio no dejan de ser unos 3-4 euros. El palacio está muy cuidado y es muy agradable pasear por sus jardines ya que, a diferencia del resto de sitios, podrás disfrutarlo prácticamente para ti solo, al menos en nuestro caso fue así.
Miguel nos contó la historia de este lugar durante el paseo y al finalizar, nos subimos de nuevo al coche para ir a visitar el conocidísimo Tirta Gangga. Con poco que hayas visto sobre Bali en las redes sociales, lo habrás visto miles de veces fotografiado.
Fotos perfectas con chic@s vestid@s perfect@s, sin gente alrededor, posando perfectamente sobre una piedra y rodeados de enormes peces de colores... ese, ese es Tirta Gangga.
El palacio tiene varias piscinas cuyo agua proviene del manantial que queda a los pies de un enorme árbol que hay a la izquierda a la entrada del complejo. Algunas de ellas están reservadas para el baño ;)
Durante el camino nos contaba que hace unos años el templo Lempuyang no era apenas visitado por los turistas pero que a raíz de hacerse famoso en las redes sociales por la famosa fotografía en las puertas del cielo, comenzó a popularizarse.
A pesar de ello, nos contó que para ellos siempre ha sido uno de los templos más sagrados por ser el más alto de todo Bali y por tanto, estar mas cerca del cielo.
Solo por este motivo, la visita merece la pena. No es ni mucho menos el templo más bonito, pero si su entorno o mejor dicho, sus vistas.
🚗Para ascender hasta el templo tienes 3 opciones:
- Con tu propio vehículo: si es moto.
- Andando: inviable si no te sobra el tiempo, está bastante lejos y es un ascenso muy duro.
- En shuttle contratado al llegar: el mas recomendable.
Nosotros optamos por la tercera opción, el precio es de 20.000 rp por persona y por viaje, es decir, 40.000 rp ida y vuelta por persona. Cargan una especie de camioneta pick-up con varios turistas y te llevan hasta arriba.
Cuando llegas, te prestarán un sarong si no tienes y un pañuelo para taparte los hombros (si los llevas descubiertos). Al atravesar la puerta del templo, los sacerdotes te echarán en la cabeza agua bendecida. A partir de aquí, tienes dos opciones:
Pasear por el templo y observar las preciosas vistas que quedan tras las puertas del cielo con el Monte Agung de fondo y/o esperar unas 2 horas de cola para hacerte una foto frente a ellas a cambio de una propina.
La foto la habrás visto miles de veces, pero hay algo que debes saber antes de visitarlo para no decepcionarte. Yo lo sabía, por lo que ni me defraudó ni me entusiasmó, como digo, creo que está en un entorno espectacular y que sólo por ser tan sagrado para ellos, merece la pena visitarlo. Pero como muchas cosas en esta vida, nada es lo que parece y la fotografía que habrás visto tantas veces, no es del todo real. El lago que hay bajo las puertas no existe. Lo crean los propios balineses que te hacen la foto gracias a un cristal ahumado que ponen bajo la lente de tu teléfono et voilà:
Nosotros estando allí y sabiendo lo que nos íbamos a encontrar, no íbamos a volver sin el retrato de la parte más bonita del templo con o sin lago (para mi gusto) junto con las preciosas escaleras traseras.
Durante el camino de vuelta, hablamos con Miguel acerca de nuestro itinerario para el día siguiente, decidimos hacer unos cambios de última hora según lugares turísticos que él mismo nos contaba y según el tiempo que llevaba cada uno. Nos contó que al día siguiente él no podría venir porque tenía examen y vendría su padre, Andres, con quien contacté la primera vez desde España, así que, nosotros encantados de haberle conocido a él, a su hermano David y a su padre al día siguiente.
Como los días anteriores, decidimos quedarnos en el centro de Ubud para aprovechar el final de la tarde, cenar, tomar un helado y después, volver de noche a nuestro hotel cogiendo el servicio de recogida que ofrecían, cerca del Lotus Café.
¿Qué os ha parecido el post? y con respecto a Lempuyan ¿Esperaríais también hora y pico de cola para un foto ya que estais allí, iríais pero no haríais foto o simplemente no os parece un templo "digno de visitar"
-> Día 4 en Bali - Ruta Sur
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