La noche anterior, llegamos a Albi para la hora de la cena. A diferencia del resto de Grandes sitios, Albi tiene más locales abiertos, es un tamaño de ciudad mediano por lo que hay más ambiente e incluso iluminado navideño. Cenamos en el precioso y pequeño restaurante L'Esprit du Moulin por unos 17 euros por persona, estaba todo delicioso.
Despertamos en el hotel Inter-Hôtel Le Cantepau.
El parking está incluido en el precio de la habitación. Es un hotel normalito, las habitaciones son algo pequeñas pero pasar una noche como es nuestro caso, y en relación calidad precio, es bastante aceptable. El desayuno buffet libre cuesta 9 euros, pero preferimos salir temprano a ver la ciudad y desayunar fuera.
Salimos del hotel temprano, es el primer día del viaje que nos llueve, al menos es una lluvia muy fina y soportable bajo nuestras capuchas. Vamos hacia el centro de la ciudad. Estamos a unos 15 minutos andando, pero merece la pena puesto que para llegar alli, tenemos que cruzar el puente que cruza el río Tarn. Las vistas desde ahí son preciosas.
Vistas desde el puente
Si observas, entenderás porque se la conoce como la ciudad roja, y es por la mezcla de ladrillo y piedra de todas sus construcciones.
Desayunamos en una pequeña pastelería frente a la Catedral de Santa Cecilia. La catedral de ladrillo más grande del mundo. Tiene un interior único por lo que su construcción ocupó los siglos XV y XVI. Sus pinturas sobre la bóveda, el juicio final, el coro, los órganos... es sencillamente impresionante. Podríamos habernos quedado horas contemplando, cada rincón está cuidadosamente decorado. El acceso a la catedral es gratuito, para entrar al coro el precio es de 5 euros.
Desayunamos en una pequeña pastelería frente a la Catedral de Santa Cecilia. La catedral de ladrillo más grande del mundo. Tiene un interior único por lo que su construcción ocupó los siglos XV y XVI. Sus pinturas sobre la bóveda, el juicio final, el coro, los órganos... es sencillamente impresionante. Podríamos habernos quedado horas contemplando, cada rincón está cuidadosamente decorado. El acceso a la catedral es gratuito, para entrar al coro el precio es de 5 euros.
Catedral de Santa Cecilia de Albi
Interior Catedral, coro de Santa Cecilia de Albi
Pintura Juicio Final dentro de la Catedral de Santa Cecilia de Albi
Callejeando, llegamos al Palacio de Berbie. En su interior se aloja el museo del artista Henri Toulouse-Lautrec. El acceso a los unas vistas preciosas hacia el río Tarn.
Siguiendo nuestras notas, encontramos la casa más antigua de Albi y la que fue la casa natal de Toulouse-Lautrec.
Desde el año 2010, la ciudad episcopal de Albi fue clasificada al Patrimonio Mundial de la UNESCO. La ciudad episcopal está estructurada precisamente por todo lo mencionado anteriormente. El alrededor de la catedral, el palacio-fortaleza Berbie, el museo dedicado a Henri de Toulouse-Lautrec, la colegiata y el claustro Saint-Salvi.
Tras unas 3-4 horas visitando Albi, volvemos al hotel para coger el coche. Nuestro siguiente destino del viaje es Carcassonne. Para ir a Carcassonne desde Albi, tenemos dos posibles rutas, pero la más corta es pasando precisamente por Toulouse, que es nuestro último destino del viaje. Igualmente, no podíamos haberlo distribuido de otra manera ya que nuestro vuelo de vuelta sale desde Toulouse.
CARCASSONNE
De camino a Carcassonne, pasando por Toulouse, hay dos peajes. El primero cuesta 1,5 y el segundo 8 euros.
A la entrada de esta ciudad medieval, empezamos a ver que hay atasco. Algo increíble para nosotros ya que venimos de una ruta por varios Grandes Sitios donde hemos estado solos, donde hemos visto parking vacíos, tiendas y bares cerrados... Pues bien, Carcassonne, es todo lo contrario...y eso que estamos en temporada baja.
Llegamos en torno a las 12.30 de la mañana. Seguramente, si llegas bastante temprano, podrás disfrutar más a solas de la ciudad, pero según avance la mañana eso será imposible. Sobretodo lo notarás en la plaza central o para encontrar mesa en sus restaurantes a la hora de comer.
Decidimos en primer lugar ir a la oficina de turismo. Para llegar hasta allí, atravesamos en primer lugar una inmensa puerta que da acceso a la ciudad medieval. El lugar es impresionante y no hemos hecho más que entrar. Vamos atravesando entre turistas (la gran mayoría Españoles) a través de las empedradas y ligeramente empinadas calles hasta que damos con la oficina de turismo, allí nos dan un mapa y nos señalan como importante el acceso a las murallas, el centro histórico y la ciudad navideña de Carcassonne, que está a uno 15-20 minutos andando desde allí.
Imagen desde la entrada de Carcassonne
Vamos hacia la zona de acceso a las murallas para comprar las entradas pero decidimos abortar misión. Las colas son inmensas, probamos a cogerlas online desde el teléfono móvil pero en un par de webs están agotadas así que, decidimos hacer el mismo recorrido por fuera.
Precio acceso murallas: 8.50 €
Si quieres evitar colas, reserva tus entradas con anterioridad.
No dudes en pedirte el plato típico de Carcassone, el Caussolet, una especie de fabada con menos sabor para mi gusto y con más carne. Si te gustan los guisos, te gustará.
Terminamos de comer y damos un par de vueltas más por dentro de la ciudad, disfrutando de las preciosas tiendas de dulces que tienen auténticas obras de arte hechas en chocolate. Compramos una bonita lata llena de unos caramelos tipo chupa chups que nos comentaron, son típicos de toda la zona y nos marchamos a ver la ciudad navideña de Carcassone.
Si vas en navidad, te diré sinceramente que no merece la pena que vayas hasta aquí. Es la típica feria de cualquier pueblo de España pero ambientada en navidad. Por lo único que mereció la pena el desplazamiento es porque desde ahí andamos volviendo hacia Carcassone cruzando el puente y desde ahí, las vistas son preciosas.
Se puede observar toda la ciudad medieval en la lejanía. Me recuerda mucho al mirador que hay en Ávila para observar la muralla iluminada de lejos.
Cansados ya y con la noche encima, nos ponemos rumbo a Toulouse, nuestro último destino en este divertido y estupendo viaje.
El trayecto en coche dura una hora aproximadamente. Llegamos, subimos las maletas al hotel y buscamos sitio para cenar. Mañana despertaremos pronto para ver Toulouse en un día :).
➡ Día 4. Un día en Toulouse
Precio acceso murallas: 8.50 €
Si quieres evitar colas, reserva tus entradas con anterioridad.
Recorrido muralla desde abajo
Catedral de Carcassonne
La ciudad sigue llena y va siendo hora de comer, tras una hora dando vueltas y preguntando por mesa libre para comer 7 personas, conseguimos sentarnos en uno de los restaurantes de la plaza central.No dudes en pedirte el plato típico de Carcassone, el Caussolet, una especie de fabada con menos sabor para mi gusto y con más carne. Si te gustan los guisos, te gustará.
Si vas en navidad, te diré sinceramente que no merece la pena que vayas hasta aquí. Es la típica feria de cualquier pueblo de España pero ambientada en navidad. Por lo único que mereció la pena el desplazamiento es porque desde ahí andamos volviendo hacia Carcassone cruzando el puente y desde ahí, las vistas son preciosas.
Se puede observar toda la ciudad medieval en la lejanía. Me recuerda mucho al mirador que hay en Ávila para observar la muralla iluminada de lejos.
El trayecto en coche dura una hora aproximadamente. Llegamos, subimos las maletas al hotel y buscamos sitio para cenar. Mañana despertaremos pronto para ver Toulouse en un día :).
➡ Día 4. Un día en Toulouse
No hay comentarios:
Publicar un comentario