Llegamos a las 8 de la mañana al aeropuerto de Toulouse, rápidamente recogemos el coche de alquiler que teníamos reservado y nos vamos camino a Cordes Sur Ciel para comenzar nuestra ruta. Tenemos por delante 86 km.
De camino a Cordes, paramos en un supermercado para comprar unos bollos y unos batidos para desayunar. Mas adelante nos arrepentiremos de no haber cogido nada más ya que, nos resultará muy dificil encontrar alguna tienda o bar abierto para comer algo.
Es temporada baja en los Midi Pyrénées y este será el mayor inconveniente que nos encontraremos.
He leído en varios blogs que esta zona queda invadida de turistas en verano. Los pueblos abarrotados de gente, de autobuses turísticos..., por tanto, me alegro que nuestro mayor mal fuera ese. Tras comprar, seguimos camino a Cordes Sur Ciel.
Los paisajes que atravesamos son espectaculares, todo alrededor es bosque, pueblos pequeñitos con casas de piedra y ventanas con pequeñas puertas de madera en diferentes colores... paisajes dignos de cuento.
Durante el camino, vamos leyendo la guía que habíamos preparado para cada pueblo. Cuando salgo, no solo me gusta disfrutar de un lugar bonito sino, conocer sus curiosidades, su historia, el porqué de algunos nombres etc...
De camino a Cordes, paramos en un supermercado para comprar unos bollos y unos batidos para desayunar. Mas adelante nos arrepentiremos de no haber cogido nada más ya que, nos resultará muy dificil encontrar alguna tienda o bar abierto para comer algo.
Es temporada baja en los Midi Pyrénées y este será el mayor inconveniente que nos encontraremos.
He leído en varios blogs que esta zona queda invadida de turistas en verano. Los pueblos abarrotados de gente, de autobuses turísticos..., por tanto, me alegro que nuestro mayor mal fuera ese. Tras comprar, seguimos camino a Cordes Sur Ciel.
Los paisajes que atravesamos son espectaculares, todo alrededor es bosque, pueblos pequeñitos con casas de piedra y ventanas con pequeñas puertas de madera en diferentes colores... paisajes dignos de cuento.
Durante el camino, vamos leyendo la guía que habíamos preparado para cada pueblo. Cuando salgo, no solo me gusta disfrutar de un lugar bonito sino, conocer sus curiosidades, su historia, el porqué de algunos nombres etc...
CORDES SUR CIEL
Se trata de un pueblo medieval situado en lo alto de una montaña, está protegido por cuatro murallas que protegen sus estrechas y bonitas calles. Como curiosidad, quizás te interese saber que en 1222, el conde de Toulouse Raimond VII, fundó Cordes con este nombre (que significa Córdoba en occitano) inspirándose en nuestra Córdoba Española.
Se trata de un pueblo medieval situado en lo alto de una montaña, está protegido por cuatro murallas que protegen sus estrechas y bonitas calles. Como curiosidad, quizás te interese saber que en 1222, el conde de Toulouse Raimond VII, fundó Cordes con este nombre (que significa Córdoba en occitano) inspirándose en nuestra Córdoba Española.
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Llegamos a Cordes a las 11 de la mañana. Subimos con el coche hasta uno de los parking más cercanos al centro histórico ( no tengáis miedo a las estrechez de sus calles. Se puede subir y el parking se encuentra al final).
Desde ahí iniciamos el ascenso al pueblo a través de sus pendientes adoquinadas.
Es un pueblo muy pequeño que no requiere llevar ningún itinerario. A pesar de ello, entramos en la oficina de turismo, uno de los pocos locales que estaban abiertos en todo el pueblo. Nos atiende una mujer encantadora que habla Español, nos indica donde están los servicios del pueblo (todos los Grandes sitios de Midi Pyrénées disponen de ellos) y recalca la visita a la iglesia, al mercado y pasear alrededor de la muralla.
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Decidimos dejarnos llevar sin rumbo por sus calles y sacar muchas fotografías ya que podemos disfrutar de todo el pueblo para nosotros. No hay coches, no hay turistas, no hay apenas residentes... Tomándotelo con calma, te llevará un par de horas ver el pueblo.
Antes de ir a Najac, nuestro siguiente destino, decidimos ir a un mirador según las indicaciones que habíamos leído en un blog y que seguramente te interese visitar si vas a Cordes Sur Ciel ya que, podrás tomar la fotografía perfecta de todo el pueblo en la lejanía.
Ahí comienza el camino. Puedes ir a pie o en coche, aunque esta segunda opción (que fue la que tomamos nosotros) no es apta para conductores inexpertos, cuesta un poco dar la vuelta en el final y el camino es bastante estrecho.
Nos dirigimos camino de Najac siendo conscientes de lo pronto que se almuerza en Francia y pensamos que deberíamos comer nada más llegar al pueblo. Algo que no resultó tarea fácil porque la mayoría de bares/restaurantes estaban cerrados. Acabamos comiendo unas ensaladas con paté y patata en lo que en principio parecía una tienda.
De postre, decidimos probar lo que habíamos leído que era un bollo típico de Najac y el cuál tiene un sabor similar a nuestro roscón de reyes.
De postre, decidimos probar lo que habíamos leído que era un bollo típico de Najac y el cuál tiene un sabor similar a nuestro roscón de reyes.
El pueblo no tiene perdida, el parking está a la entrada del mismo. Tras un largo ascenso en una estrecha calle en la que te asombrará como los habitantes de Najac suben sus coches hasta ahí, aparecerás en el castillo del pueblo.
Cuando nosotros llegamos estaba cerrado, aquí tienes las tarifas y horarios por si te interesara:
Desde mi punto de vista, lo que más vale la pena del pueblo es la imagen que tienes justo desde la torre. Es impresionante, se ve todo el pueblo casita tras casita.
Siguiendo el camino, dejando atrás la torre, llegarás a la iglesia de Najac.
SAINT CIRQ LAPOPIE
Con la noche casi encima y la niebla bastante baja, nos topamos a la derecha de la carretera con una imagen digna de un escenario de El señor de los anillos o de Juego de Tronos. Un pueblo situado al borde de una colina, Saint Cirq Lapopie.
Justo en ese punto, teníamos la foto perfecta, pero no había mirador y no paramos pensando que tendríamos una imagen similar desde el otro lado, pero no. Te recomiendo que si tienes alguna forma de parar con el coche en ese punto, pares para disfrutar de la vista.
Avanzando un poco más, dejando a la derecha el pueblo, hay un parking gratuito en temporada baja. Dejamos el coche ahí y nada mas salir, nos topamos con un mirador.
Justo en ese punto, teníamos la foto perfecta, pero no había mirador y no paramos pensando que tendríamos una imagen similar desde el otro lado, pero no. Te recomiendo que si tienes alguna forma de parar con el coche en ese punto, pares para disfrutar de la vista.
Avanzando un poco más, dejando a la derecha el pueblo, hay un parking gratuito en temporada baja. Dejamos el coche ahí y nada mas salir, nos topamos con un mirador.
Callejeando, sentimos una sensación agridulce con respecto a este pueblo. No se ven luces en la ventanas, no hay locales abiertos, no hay gente... Parece un pueblo fantasma y eso le da un toque de magia a la par que nos hace perder un poco el interés. Sin embargo, siendo objetivos, podemos asegurarte que es un pueblo espectacular pero nos hubiera gustado verlo algo más temprano para ver cómo sus calles cobraban vida.
Con la noche ya encima y el cansancio acumulado de todo el día, cogemos el coche y nos vamos a Rocamadour donde pasaremos nuestra primera noche.
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