DÍA 2 EN BALI- ALREDEDORES DE UBUD Y TEMPLO MADRE

Como cada mañana en nuestros viajes, el segundo día madrugamos. En torno a las 8.30 salimos del hotel. Esta vez, nuestro guía y chofer era Miguel, el hermano mayor de David (quien nos acompañó el día anterior) e igual de agradable.

Antes de contaros paso a paso nuestra ruta, os dejo el itinerario global que hicimos ese día:

• Día 2: Goa Gajah - Cascada Kanto Lampo - Templo madre Besakih - Tirta Empul - Gunung Kawi

Nuestra primera parada fue en Goa Gajah (la cueva del elefante), a tan sólo 3 km de Ubud.
El templo, como su nombre indica, tiene un enorme elefante tallado en piedra a la entrada. 

Dentro, hay una cueva con una entrada también tallada, en cuyo interior hay una escultura de Ganesha (dios de la ciencia) que se representa mediante un elefante cuya trompa está tocando en su mano, un cerebro que sostiene. También hay 3 esculturas que representan el símbolo de la fertilidad.

💰El precio de la entrada es de 15.000 rupias.

En la zona, estaba todo decorado para celebrar ceremonia de cremación. Las estatuas del templo llevaban sarong, había ofrendas por todas partes y algunos que otros objetos en el suelo para quemar.

Miguel nos contó que hay algunos meses en los que por ciertas circunstancias que se combinan, se convierten en buenos para celebrar bodas y cremaciones (yin yang).

Tras salir de la cueva paseamos por el entorno, es realmente bonito. En el siglo XI, durante la construcción de este templo, se plantó un enorme árbol que destaca sobretodo por sus enormes raíces.

El templo dispone también de dos grandes piscinas que son para purificarse antes de la oración.

Después, fuimos a visitar la cascada Kanto Lampo. Para acceder a ella tendrás que mojarte, se accede a través del río (no cubre mucho ni es peligroso) pero no olvides llevar bañador.

Justo a la orilla, hay habilitadas unas estanterías de metal donde podrás dejar tu mochila (te recomiendo que lo más importante para tí lo lleves encima en una funda sumergible o lo dejes en tu vehículo). Bali no es peligroso y nunca tuvimos ningún problema, además Miguel se quedaba cerca de las mochilas, pero hay más turistas y nunca se sabe...

Cuando nosotros llegamos frente a la cascada, había solo una pareja. Respetamos su turno de hacerse fotos y a continuación subí yo. En la imagen parece peligroso subir a la piedra, pero con cuidado y unas buenas cangrejeras no tendrás problema.

👚Como decía, a modo de resumen te recomiendo llevar bañador, toalla, cangrejeras, funda para el móvil y si llevas ropa de cambio para continuar tu trayecto, mejor.

Nuestra siguiente parada fue el Templo Madre, Pura Besakih. Para mí, el más bonito de todo Bali y para ellos, el más importante. Como Miguel nos contó, lo que para los católicos sería El Vaticano, para los hinduistas balineses es el templo Besakih.
💰Precio de la entrada: 60.000 rp.
Al igual que Goa Gajah, estaba todo decorado para ceremonias de cremación. Los balineses, todos vestidos para la ocasión portando ofrendas y objetos que prender.

El templo madre consta de 22 templos, uno por cada familia que hay en Bali.
Miguel nos enseñó el suyo, precioso como todos. 
Hay también 3 templos dedicados a cada uno de los dioses de la trinididad hindú: Shiva, Brahma y Visnu.

Siendo el más bonito para nosotros, nos sorprendió que no fuera patrimonio de la humanidad como había sido declarado Taman Ayun por ejemplo, Miguel nos dijo que ese nombramiento en ciertos sitios ni siquiera les interesa porque hay que cumplir ciertas cosas, permitir entradas de cierto modo etc... Su religión para ellos es lo más importante.

Maravillados y dispuestos a continuar nuestra ruta, nos marchamos del Templo Madre para ir a comer. Miguel nos llevó a un sitio espectacular, no tanto por la comida (que aun así estaba todo muy rico) pero sí por su ubicación.
El Lereng Agung restaurant, donde comimos de buffet un delicioso nasi goreng, pan de gambas, tallarines etc... y donde disfrutamos de unas vistas espectaculares.

Lo que menos me gustó fue el murciélago enorme que tienen a la entrada... les tengo fobia a los de tamaño normal, como para no agobiarme sabiendo que cerca estaba ese animal.

Esta vez, nuestro guía no comió con nosotros. A pesar de que insistimos, nos comentó que comería con el resto de guías en otra sala en donde el restaurante les invita. Es algo muy común cuando viajas con chofer, en nuestro viaje a África, Said comía siempre en otro lugar.

Con el estómago lleno y más ganas de seguir conociendo, nos fuimos a ver el templo Tirta Empul.
Este se divide en tres partes principales, el patio delantero, el patio central, y el jardín interior.
El patio central es el más famoso, donde se encuentran las piscinas para iniciar el ritual de purificación antes de la oración. 

Existe un modo concreto que indica en qué sentido comenzar a adentrarse en ellas. Los turistas también pueden participar, siempre con respeto. Miguel nos dijo que es positivo para ellos y que no hay ningún problema en que lo hagamos.

No nos animamos porque la verdad me daba bastante pereza meterme, además el agua tenía hasta algún pez muerto... así que no era muy apetecible, solo nos mojamos un poco la cabeza. Ya estamos purificados jeje
El jardín interior tiene una gran piscina en la que se ve perfectamente cómo el agua brota del manantial, es alucinante contemplarlo.
Con diferencia, es el templo en el que más gente había de todos los que habíamos visitado. Imagino que se iban acumulando porque en hacer el ritual se tarda unos 15 minutos en total.

Nuestra última visita fue a Gunung Kawi, el templo dedicado al dios del agua en el que se encuentran enterrados los miembros de la familia real.

💰El precio es de 15.000 rp.
Desde la entrada, tendrás que descender un montón de escaleras en las que a la orilla verás muchos puestos donde venden souvenirs. El camino es bastante largo y cansa, sobretodo la subida... pero merece la pena.
De nuevo, como en todos los lugares de esta maravillosa isla, Gunung kawi está situado en un emplazamiento maravilloso. Rodeado de palmeras y arrozales, acompañando al camino el río... una auténtica maravilla, es un templo que me sorprendió muy gratamente, me lo imaginaba mucho más pequeño y en una zona mucho más simple.

Las tumbas que se ven en la fotografía, a día de hoy realmente no contienen los cuerpos de la familia real, están en otra zona del templo, en una cueva.

Después de subir con la lengua fuera, llegamos al coche para volver a Ubud. 
Como llegamos antes de que anocheciera, le pedimos a Miguel que en vez de llevarnos al hotel, nos dejara en el centro.
Aprovechamos para visitar el palacio, regatear mucho en el mercadillo, tomar un helado y cenar. Cenamos en un italiano porque después de 5 días en Indonesia, nos iba a salir el Nasi Goreng por las orejas, así que el cuerpo nos pedía algo diferente.
Ubud en ese aspecto, tiene distintas ofertas gastronómicas así que puedes variar.

Cerca del templo que veis en la fotografía, el Saraswati temple, está el Café Lotus, un restaurante muy conocido de Bali. Miguel nos lo recomendó, pero no llegamos a probarlo por el motivo que os comenté anteriormente.

El hotel disponía de shuttle gratuito para regresar del centro hasta él, pero como no sabíamos dónde paraba exactamente cogimos un taxi. Como todo lo que se vende aquí, se regatea, así que conseguimos que nos llevara a muy buen precio. Igualmente, a la mañana siguiente nos informamos dónde se cogía el shuttle para poder hacer lo mismo en nuestro próximo día en isla y disfrutar del ambietazo del centro.

Qué os ha parecido nuestro segundo día de ruta? Espero que el post os haya hecho disfrutar.

Un saludo!

Día 3 en Bali >